Acompañando las transformaciones
del mundo

La crisis sanitaria, la revolución tecnológica, el cambio climático: el mundo actual está impulsado por poderosos cambios fundamentales. Las necesidades y aspiraciones de individuos y organizaciones se reinventan constantemente. Edenred, como observador y actor privilegiado de estas macrotendencias, contribuye hoy al surgimiento de los usos del mañana.

Un mundo laboral cambiante

La guerra por el talento, la “gran renuncia”, las nuevas formas de trabajo: los últimos tres años han redefinido radicalmente la relación entre empleadores y empleados. Y la transformación en el trabajo apenas está comenzando. Actualmente, el desafío para las empresas no es solo atraer y retener, sino también motivar a los mejores perfiles de manera cotidiana.

Entre las opciones a su disposición está el ofrecer condiciones de trabajo flexible y una gama de beneficios variados y personalizados.

Una nueva era para la movilidad

El mundo de la movilidad está experimentando un punto de inflexión paradójico. El aumento de la movilidad de bienes y personas, una fuente importante de progreso económico y social, también pesa mucho sobre el medio ambiente. El transporte es, por lo mismo, el segundo mayor emisor de gases de efecto invernadero en el mundo. Además, la escasez de combustibles fósiles requiere de métodos de producción más contaminantes.

Sin embargo, el sector también ha sufrido su transformación: los vehículos eléctricos y conectados, el transporte combinado y las micromovilidades urbanas están renovando la experiencia de movilidad democratizando alternativas más ecológicas.

Nuevas experiencias de pago

La crisis sanitaria aceleró la transición de los intercambios comerciales locales a las compras remotas, impulsando el crecimiento de los sitios de comercio electrónico. En línea, a través de dispositivos móviles o sin contacto, los métodos de pago siguen lógicamente esta digitalización. Así, para 2025, los pagos instantáneos o el dinero electrónico representarán más del 25% de las transacciones no en efectivo en todo el mundo, en comparación con el 14,5% en 2020.

Lo mismo se aplica a los pagos entre empresas, cuya mayor digitalización permite a las organizaciones optimizar sus transacciones y la gestión de efectivo. Todo el desafío es identificar soluciones que combinen confiabilidad, seguridad y sostenibilidad.

Responsabilidad ambiental en el centro

Los ciudadanos y las organizaciones se cuestionan colectiva e individualmente sus patrones de consumo. Ante la emergencia climática, preocupados por preservar la biodiversidad y el medio ambiente, favorecen comportamientos más responsables, enfocados en la sobriedad y la ecociudadanía.

Para las empresas, este paradigma también es una cuestión de supervivencia. Los clientes, empleados y socios esperan de ellos la misma conciencia ambiental. El marco regulatorio más restrictivo también los alienta a reducir continuamente su consumo de recursos y su huella de carbono.